Solo un pensamiento...


Las palabras dichas son llevadas por el viento y olvidadas la mayoría de las veces, pero las escritas no conocen de tiempo, son perennes. En honor a ellas; algunos de mis trabajos. 





jueves, 9 de junio de 2011

Desaparece memoria histórica de los Altos Mirandinos

Derriban residencia en la que durmió
Bolívar para construir club privado


La Casa de Las Lajas, ubicada en Laguneta de la Montaña, en la que pernoctó Bolívar, Francisco de Miranda y otros próceres de nuestra independencias, ya no existe, sólo queda el recuerdo. Piden a las autoridades aclarar qué ocurrió en el lugar.

Daniel Murolo
La Región
Según los historiadores, Simón Bolívar pernoctó al menos en 7 oportunidades en la zona que hoy conocemos como San Pedro de los Altos. Su lugar favorito para quedarse, gracias a su estratégica ubicación en el viejo camino de los españoles, era la casa del comandante José Roque Pinto, una casona de techos altos conocida como la Casa de Las Lajas.

Pero allí no soló durmió Bolívar. Durante la independencia, esta residencias albergó a Francisco de Miranda y otros próceres en su paso hacia los Valles del Tuy. Hoy día, cuando las autoridades se preparan para celebrar por todo lo alto el Bicentenario de nuestra Independencia, la histórica casona, edificada en el siglo XVII, ya no existe, lo que quedaba de ella fue derribado hace pocas semanas para construir en su lugar lo que parece ser una casa club.

José “Cheo” Hidalgo, dirigente político del municipio, aseguró que el “crimen” fue cometido ante la mirada indiferentes de las autoridades urbanas municipales y de la propia Guardia Nacional encargada de resguardar el lugar. “¿Un socialismo que acaba con la historia de su pueblo?, pues sí, aunque usted no lo crea ocurre en el municipio Guaicaipuro”, dijo.

Esta casa, ubicada en el sector Buen Paso, en el viejo camino de los españoles en Laguneta de la Montaña, fue remodelada 1.911 por el general Juan Vicente Gómez. El abandono y la indiferencia  gubernamental la condenó a permanecer en ruinas por más de medio siglo.

“Lo que quedaba de ella, sus muros de tapia y adobe, fueron derribados para construir una casa club que se oculta detrás de plásticos negros para disimular la vil canallada cometida a nuestra historia”, denunció Hidalgo.

Los residentes de la zona, aseguran que desde hace unos meses comenzaron a ver extrañados como con varios metros de plástico taparon la visibilidad. En el lugar permanecía de pie algunas paredes; en la actualidad, de lo que fue la casa, sólo es visible el característico piso de lajas que le daba nombre.

“Ciertamente estaba abandonada, quedaban un par de paredes de pie y el piso, sin embargo era visitado los fines de semana por muchas personas que conocían su historia o que simplemente querían disfrutar de la vista y el clima”. agregó Sergio Herrera, vecino de la zona.

Pidió al gobierno municipal pronunciarse y aclarar qué paso con los restos de la histórica casa y qué se construye exactamente en ese lugar. “Lo que podemos ver es que levantan una casa de unas dos plantas, dicen que es un club y otros que se trata de una residencia privada”, dijo.

“Qué está pasando señores con este adefesio que llaman revolución, cuál es la historia que contaran y le dejaran a nuestros sucesores, ¿qué pensará el presidente Chávez de este vil atropello a la historia de Bolívar?”, preguntó Hidalgo.

- A quienes nos duele la historia de este municipio debemos echarle un parado a la holgazanería municipal, alcalde ocúpese de su trabajo ponga gente conocedora de los valores históricos de este municipio a promover nuestros valores patrios, de una vuelta por Laguneta de Montaña, verifique esta denuncia y castigue con todo el peso de la ley a los que la cometieron y los que permitieron tal vil maldad a nuestra historia, en mala hora gente tan inepta vino hacerse pasar como gobernante del municipio.

Sin memoria histórica
Aunque el interés por parte de las autoridades locales por rescatar y mantener tanto estructuras históricas como parajes naturales ubicadas en Guaicaipuro es nula, ejemplo de ello es el estado de deterioro en el que se encuentra Villa Teola y la Cueva del Indio, hay comunidades que, cumpliendo con la exigencias del Gobierno Nacional, han conformado consejos comunales con la intención de rescatar estos sitios.

En agosto de 2006 los habitantes de los sectores Laguneta de la Montaña, La Mostaza, Los Aguacates, Los Angelinos y Fila de Márquez, constituyeron una organización vecinal, y unieron esfuerzos para realizar una investigación y documentación de la historia y cultura de la zona, creando un plan turístico llamado "Los caminos de Guaicaipuro”.

El proyecto contemplaba colocar seis esculturas - tótem, de tres metros de altura, de 50 a 70 centímetros de diámetro, en madera con pedestal y base de concreto, realizadas por escultores de la zona: Lucas Marrero, Evaristo Pacheco y Domingo Chapellín, en sitios estratégicos que marcaran el recorrido de 8 kilómetros que podía  hacerse caminando o en vehículo.

El consejo comunal nunca recibió el apoyo por parte de las autoridades, por lo que el proyecto se enfrió con el tiempo mientras que los sitios que serian rescatados -como La Casa de Las Lajas- desaparecen uno a uno con el pasar de los años. “O hacemos algo o nos quedamos sin memoria histórica”, sentenció Hidalgo.

martes, 7 de junio de 2011

Reactivación de la estación anunciada con bombos y platillos se convirtió en pura bulla


Convertido en un amasijo de hierros oxidados cumple 120 años el tren de 
El Encanto 
Daniel Murolo 
La Region
El 8 de junio de 2011 no hubo celebración, torta con velitas, ni mucho menos cohetones. El orgullo de los tequeños, el icono de la capital mirandina por cerca de un siglo: la antigua Estación El Encanto del Gran Ferrocarril de Venezuela, cumplió 120 años. 

Lo que fue el principal atractivo turístico de los Altos Mirandinos durante buena parte del siglo pasado, hoy se encuentra sumido en el olvido, siendo  bandera política de alcaldes locales, quienes en la última década convirtieron en tradición prometer -al menos una vez al año- su recuperación.  

El 8 de junio de 1891, fue inaugurado el Gran Ferrocarril de Venezuela. Comenzó cubriendo el tramo Caño Amarillo estación Los Teques, la cual estaba ubicada en lo que actualmente es la avenida Bermúdez, allí se acostumbraba realizar celebraciones todos los domingos. 

“Las familias se reunían, había música, retretas esperado a los viajeros que iban a Valencia”, recuerda a sus 94 años Hilda Sanz, agregando que a 15 kilómetros de la referida estación -ya desaparecida- se encontraba el lugar favorito de decenas de tequeños y turistas, la estación El Encanto.

- Allí había mucha diversión, había un grupo de personas dedicadas a vender comida, el lugar poseía baños, era un sitio ideal para hacer fiestas y pasar el fin de semana (...) venían muchos caraqueños, pasaban el día disfrutando de nuestro clima y al llegar la tarde regresaban  en el tren a su ciudad. 

Hoy día la situación es otra. “Lo único nuevo después de 120 años, es que está prohibido a los visitantes tomarle fotos al Ferrocarril por disposición del presidente del IAFE”, reseñó indignado Alberto López, un estudiante de fotografía que intentó este lunes captar con su cámara la realidad de El Encanto. “No quieren que la gente vea el nivel de deterioro en el que se encuentra”. 

“Hace 120 años nuestra ciudad prometía ser una de las capitales de Venezuela con más atractivos turísticos y buenos hoteles, estaban el Hotel Caracas, Maxín, Europa, Reverón, Guaicapuro, La Casona, Eden, Contestabile y el Hotel Francés. Hoy, somos la capital más arruinada de todo el país y así se encuentra también arruinado el Ferrocarril”, agregó José “Cheo” Hidalgo, pre candidato a la alcaldía de Guaicaipuro. 

Asegura que a pesar de ser bandera política de muchos gobernantes, El Encanto se “muere ante los ojos indiferentes de las autoridades y la corrupción, han desaparecido hasta sus rieles y los presupuestos asignados a lo largo de estos doce años sabrá Dios en qué fueron a parar”, dijo. 

- El parque El Encanto es un nido de delincuentes y la estación un amasijo de hierros oxidados. De qué turismo se habla en este país, de qué identidad habla el gobierno, lo que hoy representa nuestro tren es una muestra del desprecio y el resentimiento de los que en estos 12 años han gobernado a Venezuela. Pero no perdamos las esperanzas, feliz cumpleaños para nuestro tren, porque lo vamos a salvar.  

Un chorro de promesas y dinero
La entonces Agencia Bolivariana de Noticias (ABN), reseñaba el 25 de mayo de 2006 que el Parque Recreacional El Encanto, ubicado en Los Teques, se beneficiaría con la rehabilitación del sistema ferroviario nacional.

Según la nota de ABN, el presidente del instituto de ferrocarriles del estado aseguraba que en este parque se construirían 7 kilómetros de vía ferroviaria turística y que la inversión era de 11,81 millones de dólares.

En referida nota, daban por hecho que “los visitantes harán un recorrido a este parque en 25 minutos, desde la estación Los Lagos hasta El Encanto, a una velocidad de 15 kilómetros por hora”. 

“Este parque recreacional será reabierto a finales de este año (2006) y la demanda de usuarios se estima en 90 mil personas, cifra que aumentará a 180 mil personas en 2010”, culminaba la nota de ABN.

Un año más tarde, específicamente en marzo de 2007, la misma agencia gubernamental publicaba una nota en la que aseguraba que el Instituto Autónomo de Ferrocarriles del Estado (Iafe), invertía más de 7,5 millones de dólares en la restauración de la infraestructura ferroviaria y de las estaciones del centenario tren de El Encanto. 

“El presidente del Iafe, José Vicente Rodríguez, realizó un recorrido a lo largo de los 7,9 kilómetros del parque, para realizar un diagnóstico de las condiciones en que se encuentra y darle forma a la construcción de mejores instalaciones en las estaciones, ya que las existentes datan de 1909”.

En septiembre de 2009 era el actual alcalde de Guaicaipuro, Alirio Mendoza, quien prometía. “Según el proyecto que nos presentó el presidente del IFE, Franklin Pérez Colina, los trabajos se realizarán integralmente cada kilómetro, de modo que, hasta no terminar todos los trabajos en un tramo, no se continuará hasta el siguiente. De esta forma las personas podrán disfrutar del tren mientras se realizan los trabajos”, explicó el mandatario local a la agencia ABN.  

Junio de 2011, la realidad es la misma. No hubo nunca reactivación. 140 desempleados provenientes de La Pradera, Barrio Miranda, Los Alpes, Las Brisas, Palo Alto, Camatagua, entre otras zonas aledañas, hicieron "portón" en una bodega cercana durante varios meses. "Nos engañaron. Nos dijeron que tenían chamba para todos, pero sólo se la dieron a 15 compañeros para que hicieran labores de desmalezamiento. Otra vez la vía férrea está repleta de monte", señaló José Méndez, uno de tantos tequeños que no pierde la esperanza de ver nuevamente en movimiento el Gran Ferrocarril de Venezuela.