Vigilada por 17 GN y “amordazada” pasa
sus días la jueza Afiuni en su residencia
“Quiero que el país sepa que no vamos a permitir que el juez Ali Fabricio Paredes, juzgue a la doctora María Lourdes Afiuni. No nos vamos a prestar a un circo. Queremos un juez imparcial cuando el Ejecutivo lo decida", dijo abogado defensor
Daniel Murolo
La Región / La Voz
La jueza María Lourdes Afiuni no puede hablar. No se trata de una secuela de la intervención quirúrgica a la que fue sometida en enero, por el contrario, se recupera satisfactoriamente en su residencia, en la que permanece luego que le fuera concedida la medida de casa por cárcel; la mordaza, le fue impuesto por su juez.
Un mural con la frase: "Jueza Afiuni, Honestidad y Valor" pintado por los vecinos, así como cerca de una docena de cartelitos con el Tricolor Nacional colgados en las ventanas y balcones, son señal de que se está frente a las residencias en la vive la jueza, ubicadas en la urbanización El Cigarral del municipio El Hatillo.
A primera vista no parece haber mayor seguridad. Sin embargo, basta con ingresar al complejo de edificios para notar la presencia militar, en total, 17 guardias nacionales vigilan que Afiuni, recién operada, no se “fugue” a través de una ventana.
Una “alcabala” ubicada a escasos metros de la puerta de su apartamento, justo frente al ascensor, obliga al visitante a identificarse. Dos funcionarios dispuestos en una mesa con computadora, nos piden nuestra cédulas de identidad, datos que anotan minuciosamente en un libro de registro. “¿Amigos o familiares?”, pregunta el efectivo castrense varias veces al día a quien desee entrar.
Si bien la medida cautelar le permite permanecer en su casa y no en el Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF), existen limitaciones para las visitas de terceras personas. “Se permitirá el acceso de las visitas todos los días, incluyendo sábado y domingo, pero, no se permitirá el acceso a más de 5 personas a la residencia”, destaca.
“No puede comentarle a la prensa ni siquiera el estado del tiempo”, alerta la madre Elina Mora de Afiuni, quien en compañía de María Lourdes nos recibe en la puerta del apartamento. Lejos de lo que se pudiera pensar, la residencia de los Afiuni, donde reside la jueza desde hace varios años, junto a su hija y sus padres, es el típico hogar de una familia clase media caraqueña: comodidad sin lujos.
Junto a un ventanal, desde el que cuelga uno de los muchos carteles con los colores patrios en el que destaca en letras blancas la palabra “Afiuni”, se ubica en un cómodo sofá, mientras que su madre nos recuerda -una vez más- que la medida concedida por el Tribunal 26 de Juicio, tiene algunas restricciones, las más importante “no declarar”.
A la jueza -destaca la medida - “le está estrictamente prohibido rendir declaración ante los medios de comunicación nacionales e internacionales, como lo son: medios impresos, radiofónicos y televisivos”.
A otros presos políticos, como Felipe Rodríguez, Silvio Mérida y Otto Gebauer, sus jueces les impusieron el mismo “cerrojo”, se les impide hablar específicamente de la causa que se les sigue,. Sin embargo, en el caso de María Lourdes y quizás con el objetivo de impedir que continúe utilizando su cuenta en Twitter -con más de 68 mil seguidores o “Wilson” como ella los llama- para denunciar atropellos se le prohibió hablar “de cualquier cosa”.
“Estamos felices de tenerla en casa (...) durante el tiempo que estuvo recluida en la cárcel de Los Teques la familia vivió una verdadera pesadilla”, indica Elina. Aclara que aunque siempre supo que su hija era una mujer fuerte e íntegra, nunca imaginó que tendría el temple para, por ejemplo, defenderse “a puño limpio” con otras internas para resguardar su espacio dentro del reclusorio.
“Ahora, tras varias semanas acá en casa, es que María Lourdes puede dormir tranquila. Los primeros días lo hacía con la luz encendida, pues en el INOF tenía reflectores potentes que iluminaban toda la noche su celda (...) se despertaba sobresaltada si uno entraba a su cuarto”, narró.
Reseña que los 17 efectivos que custodian el apartamento las 24 horas del día, así como los más de 30 que toman la zona cada vez que la jueza es trasladada a tribunales o al hospital, se han “portado muy bien” con la familia en todo momento.
Como dato curioso, el Centro Penitenciario de Aragua, mejor conocido como Tocorón con más de 3.500 reclusos es custodiado sólo por 50 funcionarios, mientras que a la jueza la “vigilan” las 24 horas, 17 uniformados.
En lineas generales -agrega- los vecinos del edificio, una torre con más de 15 pisos, han apoyado la causa, tanto así que el gimnasio de la residencia fue transformado en el centro de operaciones de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB). Varias duchas, literas, un baño, así como una cocina domina el espacio que hasta diciembre era utilizado por la comunidad para ejercitarse.
“La detención de María Lourdes en el INOF no sólo unió mucho más a la familia, sino que ahora tenemos nuevos amigos, el apoyo de los vecinos así como el de miles de venezolanos y especialmente los medios de comunicación social nos ha dado mucha fuerza para seguir adelante”, narró.
Tanto la familia como María Lourdes tienen fe que la “pesadilla” terminará en corto plazo. Mientras tanto la jueza, quien lleva 16 meses en prisión, permanece en su residencia obedeciendo la orden que la obliga a no declarar ante la prensa y que le impide a nuestros lectores, por ahora, conocer las vivencias de la juez durante su estadía en el INOF.
Afiuni no irá a juicio con un juez parcializado
José Amalio Graterol, abogado Afiuni, reiteró que su defendida se mantiene firme en la decisión de no someterse a un proceso con el juez Alí Paredes, debido a la inclinación política que tiene el mismo.
Para mañana 31 de marzo está previsto que se inicie la audiencia de juicio oral y público que se lleva en contra de la juez. La defensa dejó claro que la imputada acudirá a todas las presentaciones que sean necesarias pero que “no irá a juicio con un juez parcializado que escribe para el PSUV”.
"Si bien es cierto que la magistrada va a cumplir con la medida de presentarse ante los Tribunales para registrarse, no va a asistir al juicio oral y público. Quiero que el país sepa que no vamos a permitir que el juez Ali Fabricio Paredes, juzgue a la doctora María Lourdes Afiuni. No nos vamos a prestar a un circo. Queremos un juez imparcial cuando el Ejecutivo lo decida", dijo.
Fotos: Fernando Pinilla